La hipertensión arterial es uno de los padecimientos más frecuentes en la edad adulta, y se define como presiones mayores a 140/90 mmHg, aunque hay una tendencia en la literatura mundial a considerar presión alta a cifras mayores a 120/80 mmHg, lo cual deja a la mayoría de los adultos dentro de la estadística de la enfermedad. El número dividendo (primer número o valor sistólico) corresponde a la presión cuando el corazón se contrae, el número divisor (segundo número o valor diastólico) corresponde a la fase de relajación del corazón, y se mide en milímetros de mercurio (mmHg). Según datos de la OMS, en el mundo hay más de 1280 millones de adultos con hipertensión, cerca de la mitad de ellos desconoce que la padece, y esto es porque suele no presentar síntomas.
¿Cuáles son los principales factores que condicionan tal padecimiento?: edad avanzada, herencia, sobrepeso, dieta de mala calidad (rica en sodio (sal) y grasas de mala calidad, poca fruta y verdura), ingesta de bebidas alcohólicas, tabaquismo, falta de ejercicio, otras enfermedades que condicionan o predisponen (diabetes, arterioesclerosis, enfermedades de los riñones, etc.).
Los síntomas que se presentan ante los cuales debemos estar alertas son: Dolor de cabeza, mareos, visión borrosa, confusión, zumbido de oídos, dificultad para respirar, fatiga fácil, síntomas gastrointestinales como náuseas y vómito, ansiedad, hemorragias principalmente en zonas de baja resistencia (encías, conjuntiva, nariz).
Hay algunos consejos para tratar de reducir la hipertensión o prevenirla: disminuir la ingesta de sal, bajar de peso, hacer ejercicio de manera regular, una dieta sana rica en fibra, evitar bebidas alcohólicas, dejar de fumar, reducir el estrés.
Por otro lado, si a pesar de estar observando todas estas medidas, no puedes mantener cifras aceptables o los síntomas son persistentes, te tengo buena noticias, hay tratamientos que tienden a la curación de la enfermedad, en la medida en que podamos identificar las causas y administrar tratamientos no tóxicos, es muy probable que podamos resolverlo.